Jorge Luis Borges:
“Dios mueve al jugador y éste la pieza ¿qué dios detrás de dios la trama empieza?”
“Felices los valientes, los que aceptan con ánimo parejo la derrota o las palmas”
“La derrota tiene una dignidad que la victoria no conoce”
“Ser inmortal es baladí; menos el hombre todas las criaturas lo son, pues ignoran la muerte”
“No hables a menos que puedas mejorar el silencio”
“Nada está construido en la piedra. Todo está construido en la arena. Pero debemos construirlo como si la arena fuese piedra”
“El éxito y el fracaso son dos impostores”
“La historia universal es la de un solo hombre”
“Hoy no me alegran los almendros del huerto. Son tu recuerdo”
“Sólo aquello que se ha ido es lo que nos pertenece”
“Soñar es la actividad estética más antigua”
“Todas las teorías son legítimas y ninguna tiene importancia. Lo que importa es lo que se hace con ellas”
“Quizá haya enemigos de mis opiniones, pero yo mismo, si espero un rato, puedo ser también enemigo de mis opiniones”
“Hay que tener cuidado al elegir a los enemigos, porque uno termina pareciéndose a ellos”
“¿De qué otra forma se puede amenazar que no sea de muerte? Lo interesante, lo original, sería que alguien lo amenace a uno con la inmortalidad”
“He firmado tantos ejemplares de mis libros que el día que me muera va a tener una gran valor uno que no lleve mi firma”
Solo ante el espejo
“Estoy solo y no hay nadie en el espejo”
“No hay consuelo más hábil que el pensamiento de que hemos elegido nuestras desdichas”
“Que el cielo exista, aunque nuestro lugar sea el infierno”
“Al cabo de los años he observado que la belleza, como la felicidad, es frecuente. No pasa un día en que no estemos un instante en el paraíso”
Jorge Luis Borges
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