Edward de Bono, en virtud de su formación, primero de médico y después de psicólogo, parte de las bases psicofisiológicas de los mecanismos mentales para estudiar la creatividad. En uno de sus primeros libros, El mecanismo de la mente (1971), la define como: una red nerviosa del cerebro que se comporta como un sistema autorganizado; afirmación que evidencia también la influencia en su pensamiento de la teoría de los sistemas, de la cibernética y del constructivismo (…)
En su ensayo Seis sombreros para pensar (1985), se mueve desde la idea constructivista de mirar las cosas desde seis puntos de vista diferentes antes de tomar una decisión o establecer un plan estratégico. La originalidad de la elaboración de de Bono (…) es indiscutible, y su bibliografía de más de 70 obras, que alterna contribuciones especializadas con exposiciones divulgativas de gran éxito, es un claro ejemplo de su personal capacidad de inventar. El hecho de que haya creado una verdadera escuela para el pensamiento creativo (World Center for New Thinking, 2004-2011) lo convierte en un verdadero maestro fundador (…)
Pasamos a analizar el método expuesto en Seis sombreros para pensar, evidenciando sus puntos fuertes así como los débiles.
Los 6 sombreros de de Bono
Como muestra el dibujo, los seis sombreros del método de de Bono representan 6 diferentes perspectivas en la forma de mirar los problemas a resolver o a los objetivos para conseguir, para no quedar atrapados en la linealidad de un proceso lógico directo y deductivo, y se estructuran como puntos de vista desde los que ponerse y percibir la realidad bajo observación. Los 6 puntos de vista son la expresión de las tipologías de pensamiento que normalmente se observan en las personas:
-desde el frío lógico-racional al caliente-emotivo
– del lógico-negativo, que tiende a buscar el fracaso, al de las visiones inéditas pero positivas, el pensamiento lateral
-desde el estratégico-secuencial, que define prioridades y métodos, al pensamiento positivo y optimista (de Bono, 1967).
El método consiste en descomponer los distintos modos de pensar afrontándolos uno a uno en contraposición con los otros, asumiendo roles y perspectivas incluso lejanas a las que utilizaríamos instintivamente. Con esta estratagema se busca liberarse de los esquemas de pensamiento habitual y abrirse a las diferentes posibilidades; su ejercicio reiterado pretende crear una notable flexibilidad mental e incrementar la capacidad de ver las cosas desde más puntos de vista. Como recita el imperativo ético de von Foerster: “Compórtate siempre de manera que se multipliquen las posibilidades de elección” (von Foerster, 1974) (…)
Cuestiones críticas
Pero se revelan algunas cuestiones críticas no irrelevantes.
-En primer lugar, la plena confianza en los procesos de reflexión consciente sobre uno mismo, es decir, la capacidad de auto observación y de distanciarse para mirar desde fuera. La trampa de la autorreferencialidad y, sobre todo, la alta posibilidad de autoengañarnos en tal procedimiento.
-En segundo lugar, el hecho demostrado ya por la psicología y la neurociencia de que la conciencia tiene poco poder para influir sobre las dinámicas emotivas paleoencefálicas (…) (Nardone 2019) (Para comprender esta idea, ver vídeo):
-En tercer lugar, este procedimiento se adapta a las mentes analíticas predispuestas a la valoración de los detalles y de los procesos secuenciales, pero menos a las personas intuitivas con una percepción global pero diferenciada. En este caso, el método podría ser incluso contraproducente, provocando la inhibición más que promover los destellos creativos de tipo puramente intuitivo.
Conclusiones
El modelo de de Bono, teniendo en cuenta estos detalles críticos, parece demasiado vinculado a los procesos cognitivos y a una teoría del aprendizaje por fases de experiencia conscientemente guiada. Resulta por ello idóneo para personas seleccionadas por su elevado de conciencia y por el estilo cognitivo analítico procesual con elevada motivación por aprender: por tanto, su aplicación no es extendida.
Por otro lado, el procedimiento no es tan rápido como se dice, revelándose poco útil en aquellas situaciones en las que la decisión o las soluciones creativas deben ser inmediatas.
El gran éxito del trabajo de de Bono se refiere sobre todo a la planificación estratégica, a la predisposición a actuar habiendo considerado antes todas las posibilidades y creado alternativas (…)
Los principales trabajos de de Bono, El pensamiento lateral y Seis sombreros para pensar (…) ofrecen importantes adquisiciones para utilizar en la puesta a punto de más eficaces y eficientes métodos para aprender a crear.
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